Análisis de la situación de las mujeres en Cuba y sus derechos sociales y políticos.
“Articulo 1 de la Constitución: “Cuba es un Estado socialista de trabajadores, independiente y soberano, organizado con todos y para el bien de todos, como República unitaria y democrática, para el disfrute de la libertad política, la justicia social, el bienestar individual y colectivo y la solidaridad humana.”
Oposición política: origen del término y vigencia actual.
El punto fuerte de un Gobierno es su capacidad de hacer creer a su pueblo que viven en unas condiciones saludables, de calidad, y si cabe decirse, humanas.
A la vista de la verdadera situación que sufre el país, de abusos y violaciones de derechos primarios, surgen personas que no quieren limitarse a esa “vida”, sino que desean realmente vivir. Son muchas las situaciones de grupos oprimidos y a su vez muchos los que desean cambiarlo. Y si resulta que este libre pensamiento de libertad es tan mayoritario, ¿cómo es que no se ha conseguido?
El tema del activismo cubano contra el gobierno es cada vez más palpable en los medios de comunicación así como en las calles, y es cierto que son muchas las personas que quieren cambiar la situación, pero muy pocos los que salen a luchar por ello. Esto es debido a que el gobierno contra el que se enfrentan es un equivalente de Dios en la tierra: lo ve todo (pues tienen espías y hackers), lo sabe todo sobre las situaciones familiares, laborales y de amistades de cada uno de sus ciudadanos, y estas son sus armas contra ellos.
Es por esto que los súbditos tienen miedo de revelarse, ya que toda su información personal y sus día a día puede ponerse en riesgo, y no solo el suyo propio, sino el de sus familiares más próximos. Esta es una realidad que durante años ha caído como una losa sobre los ciudadanos de Cuba.
Desde este abril del año 2018 el gobierno está en manos de Miguel Díaz Canel, líder del partido comunista cubano. Su llegada al poder es conocida en otras fuentes como “La herencia triste de la revolución cubana”, y solo en este año se han registrado unas doscientas detenciones de mujeres, de las cuales más de un 70% de las arrestadas fueron opositoras, cifra que según datos de la OCDH no cesa de crecer.
Diferentes formas de oposición femenina: debilidades, fortalezas y complementariedad.
Aunque cada vez hay más conciencia de los abusos del gobierno, ha disminuido el número de opositores visibles, debido al miedo constante de caer en manos del corrupto sistema comunista que, con mil ojos y manos, gobierna el país y lo maneja y dirige a su antojo.
Las mujeres opositoras y en este caso, Las Damas de Blanco, han sufrido bajas por el encarcelamiento de varias de ellas durante los últimos años, con cuatro compañeras aún en prisión, solo por el hecho de pertenecer a este colectivo defensor de la mujer cubana.
El miedo es la cara más visible del gobierno cubano, manifestado en forma de abusos físicos y psicológicos, no solo a las opositoras sino también a su familia, empleando sistemas de encarcelamiento, secuestros, amenazas de despidos y de deportaciones, desapariciones, campañas de desprestigio, allanamiento, multas y persecución mediática; son los instrumentos favoritos. Éstos son desempeñados por el Ministerio de Interior, involucrado también en las operaciones que buscan desintegrar los movimientos opositores. Tristemente, tanto el gobierno en general como el Ministerio en particular están apoyados y encubiertos por la policía, los directores de cárceles y los encargados de asuntos de inmigración.
En suma, la lucha pacífica de las mujeres es combatida por métodos violentos y, cabe decir, inhumanos.
A pesar de ello, el gobierno no consigue desarticular el colectivo de mujeres valientes y opositoras. Una de las ventajas que las Damas pueden aprovechar hoy día es la posibilidad de recurrir a los medios de comunicación y redes sociales. En esta era caracterizada por la tecnología informática y las facilidades comunicativas que la misma implica, la Asociación de Damas tiene importantes oportunidades de hacerse oír en todo el mundo, haciendo llegar a otras partes del mundo su situación, pudiendo sensibilizar de esta forma a otras personas que no conocían las inhumanas condiciones de vida de este sector social tan desprotegido como son las mujeres en ese país. Los medios son un fuerte aliado del gobierno, pero también lo es para las luchadoras, ya que pueden encontrarse referencias y noticias a este caso concreto, así como actualizar los hechos más recientes de la situación del país en cada momento.
Los pequeños núcleos de esta organización están asentados en países occidentales y de orientación más liberal y capitalista. De este modo, pueden permitirse ser más abiertos y agresivos en propaganda y publicidad en relación con el problema humanitario en cuestión, sin exponerse tanto a ser perseguidos, actualizando la vida del país por cuyos derechos luchan constantemente; parte de la publicidad que hacen se basa en mítines y conferencias, donde exponen el problema que viven sus compatriotas, pidiendo un mayor acercamiento de quienes les oyen y haciendo un llamamiento a personas con aptitudes de ayudar.
Resultados visibles y estrategias a seguir
En cuanto a los resultados que se están obteniendo, puede percibirse que este país, gracias al fuerte posicionamiento ideológico e hipócrita de quien empuña el poder (y el terror) está hoy en el punto de mira de muchos periodistas e informativos a nivel internacional, donde la prensa se posiciona cada vez más en un claro apoyo a las víctimas de los citados abusos y acosos, los cuales son ya una realidad visible para todo el mundo y un día a día en la difícil vida de los ciudadanos cubanos. Cada vez son más las personas que toman un primer contacto con este problema social, aunque no sea de cerca, pero el conocimiento es un arma muy poderosa (no en vano, la educación es el primer recurso que todos los políticos intentan controlar en el momento de ser nombrados presidentes o gobernadores); y gracias a los esfuerzos de las Damas y otras pequeñas organizaciones no tan visibles en el panorama mundial, se está, muy poco a poco, produciendo un fenómeno que lleva repitiéndose en la historia desde el surgimiento de los estados: las revoluciones. Cuba hoy está viviendo un intento de movimiento cuyo objeto es la lucha por los derechos humanos y más básicos, una paulatina revolución contra el gobierno opresor desde hace muchos años, y cada vez son más las personas que, de una forma u otra, se suman a esta causa.
En definitiva, por una parte, es cierto que el gobierno es quien tiene el poder y el control teórico. Pero hay motivos para mirar al futuro con esperanza. De este modo, aun habiendo casos de mujeres encerradas o perseguidas, y quizás también sus familias, lo cierto es que esas mismas mujeres siguen luchando por una vida digna, y por vivirla en un país donde el miedo sea cosa del pasado.